Al día de hoy el cacao lo consideramos como una golosina, para los antiguos mexicanos era parte central de su cultura, involucrado en rituales religiosos, eje en el comercio en toda mesoamérica y el altiplano entre los mexicas y los pueblos mayas, además de servir dentro de la medicina preventiva.

Está relacionado en la cultura maya con Ek Chuak, dios del comercio y la guerra; y en la mitología azteca era un regalo de Quetzalcóatl a los hombres. Su consumo era diferente de como lo entendemos hoy en día. Tras calificar el cacao como"regalo de México al mundo", este se tomaba como bebida mezclado con saborizantes por sus propiedades curativas y gastronómicas, vainilla, chiles, achiote y maíz.